Importancia
del sistema muscular en el cáncer de mama, un enfoque de ciencia, tecnología
y sociedad
Importance of muscular system in breast cancer patients: a science, technology and society approach
Yolexis Prieto Cordovés1*
Luisa María Serrano
González1
Iris Susana Bacallao Cabrera1
Natacha María Guillemí Álvarez1
1 Universidad de Ciencias Médicas de Camagüey. Camagüey. Cuba.
*Autora para la correspondencia: yprieto.cmw@infomed.sld.cu
RESUMEN
El presente
texto es el resultado de un estudio dirigido a demostrar la importancia del
sistema muscular en mujeres operadas de cáncer de mama, enfermedad con
elevada incidencia en Cuba y el mundo. Se investigó en los principales
reportes anatómicos. Se partió de la revisión documental
de textos básicos para la carrera de Medicina inherentes a la asignatura
Anatomía Humana. Se corroboró que autores como M. Prives, N. Lisenkov
y V. Bushkovich y R. D. Sinelnikov; describen los músculos, pero no relatan
su importancia en la práctica quirúrgica. Se emplearon los buscadores
en Internet y otros sitios webs de información científica, que
permitieron corroborar desde un enfoque de ciencia, tecnología y sociedad
la importancia del tejido muscular y su aplicación en técnicas
reconstructivas en pacientes operadas de cáncer de mama. Se constató
que los músculos más usados son los rectos abdominales, los dorsales
anchos, los gráciles y el tejido adiposo del pliegue glúteo.
Palabras clave: cáncer de mama; músculos; técnicas reconstructivas.
ABSTRACT
The present
text is the result of a study directed to demonstrate the importance of the
muscular system in women who had a surgery on breast cancer, illness with high
incidence in Cuba and the world. It was investigated in the principal anatomical
reports. It began with the documentary review of basic texts for the career
of Medicine inherent to the subject Human Anatomy. It was corroborated that
authors like M. Prives, N Lisenkov and V Bushkovich and R. D. Sinelnikov; they
describe the muscles, but they do not report their importance in surgical practice.
It was used the searche engines on Internet and other web sites of scientific
information, which allowed to corroborate from an approach of science, technology
and society the importance of the muscular tissue andits application in reconstructive
techniques in patients who undergoa breast cancer surgery. It was stated that
the most used muscles are the abdominal rectus, the latissimusdorsi, the graceful
ones and the adipose tissue of the gluteus fold.
Keywords: breast cancer; muscles; reconstructive techniques.
Recibido: 3/4/2018
Aprobado: 12/3/2019
Introducción
Los estudios
de la importancia de los músculos en la cirugía reconstructiva
luego de afrontar un cáncer de mama, hoy se insertan en el contexto del
enfoque de ciencia, tecnología y sociedad (CTS).
Los estudios
de CTS definen hoy un campo de trabajo reciente, heterogéneo y bien consolidado,
de carácter crítico, en relación con la tradicional imagen
esencialista de la ciencia y la tecnología, y de carácter interdisciplinario
por concurrir en él disciplinas como la filosofía y la historia
de la ciencia y la tecnología, la sociología de la ciencia y del
conocimiento científico, la teoría de la educación y la
economía del cambio técnico.(1)
Estos estudios
buscan comprender la dimensión social de la ciencia y la tecnología,
tanto desde el punto de vista de sus antecedentes sociales como de sus consecuencias
sociales y ambientales, es decir, tanto en lo que concierne a los factores de
naturaleza social, política o económica que modulan el cambio
científico tecnológico, como en lo que concierne a las repercusiones
éticas, ambientales o culturales de ese cambio.(2) Se pretende en esta
oportunidad demostrar la importancia de los músculos en el cáncer
de mama desde un enfoque de ciencia, tecnología y sociedad.
El sistema
osteomioarticular, también conocido como aparato locomotor, es el conjunto
de órganos que realiza la función de mecánica animal. Los
músculos constituyen la parte activa del aparato locomotor, los cuales
desarrollan las propiedades funcionales de contractibilidad, excitabilidad y
elasticidad. Los movimientos son resultado de la contracción y relajación
alterna de ellos, que convierten la energía química en mecánica,
la cual genera energía para realizar trabajo y producir los movimientos.(3,4,5,6)
La principal
clasificación que se utiliza para la descripción de los músculos
es teniendo en cuenta la región del cuerpo donde se localizan, en el
esqueleto axil o en el esqueleto apendicular. Algunos músculos del cuerpo
humano se utilizan para la reconstrucción de la mama luego de una mastectomía,
en pacientes diagnosticadas de cáncer de mama. Los músculos que
más se han utilizado en esas operaciones han sido los que pertenecen
a las regiones del tronco, tanto dorsales como ventrales y algunos de los miembros
inferiores, específicamente de la región glútea y del grupo
medial del muslo.
La reconstrucción
mamaria comienza en el año 1963 con la introducción de la primera
reconstrucción con implante de silicona por Cronin y Gerow, lo que estimuló
a que durante las décadas del 60 y 70 la reconstrucción protésica
fuera el método más utilizado de reconstrucción. En el
año 1972 Radovan describió el uso de expansores tisulares para
mama y en 1977 Schneider, Hill y Brown y Muhlbauer y Olsbrich incorporaron el
uso del colgajo de músculo cutáneo latissimusdorsi para este tipo
de reconstrucción. Esta técnica fue popularizada por Bostwick,
Vasconez y Jurkiewicz y Maxwell y Hoopes en publicaciones posteriores.(7)
Un verdadero
avance de la ciencia y la tecnología en la cirugía reconstructiva
de la mama fue la introducción de los colgajos abdominales en la década
de los 80, que permitieron brindar un mayor volumen de la reconstrucción,
sin la necesidad de utilizar una prótesis. El colgajo músculo-cutáneo
del músculo recto abdominal transverso (TRAM transverse rectus abdominis
myocutaneous) se ha transformado en el gold standard en muchos países
y continúa siendo el método reconstructivo autólogo más
utilizado, debido a la facilidad de su técnica y porque la región
abdominal proporciona la mejor calidad y cantidad de tejido necesario para reconstruir
una mama, siendo de aceptación general que los resultados con tejidos
propios son superiores a la reconstrucción protésica.
En Cuba
la reconstrucción mamaria comenzó en el decenio de 1980. Sus pioneros
fueron el Dr. Alejandro Martínez, del Servicio de Cirugía Plástica
del Hospital Hermanos Ameijeiras, y el Dr. Orlando Lezcano, en igual servicio
del Hospital General Calixto García. Adicionalmente, los doctores Rubén
Ferlhandler Bardina (mastólogo) y Zoilo Marinelo hicieron reconstrucciones
mamarias en el Instituto Nacional de Oncología y Radiobiología
(INOR). Los colgajos más utilizados fueron el colgajo miocutáneo
de dorsal ancho y el TRAM. En 1998 se recoge una publicación sobre una
reconstrucción mamaria realizada por Carrillo y Rodríguez; los
autores mostraron resultados quirúrgicos en 12 pacientes mastectomizadas
en el INOR entre 1992 y 1998, cuyas reconstrucciones se realizaron mediante
la colocación de implantes mamarios. El Servicio de Cirugía Plástica
del INOR se creó en el 2002, y las primeras reconstrucciones se realizaron
en el 2007.(8)
Las mamas siempre han sido pensadas como sinónimo de erotismo y feminidad. Para cada mujer son una parte muy preciada de su cuerpo. Luego de una mastectomía, la mujer puede sufrir variables trastornos psicológicos como ansiedad, insomnio, sentimiento de inutilidad y autodevaluación, así como crisis personal y de interrelación.
Desarrollo
Los nuevos
conocimientos adquiridos por el hombre, el desarrollo de las nuevas formas productivas
a partir de los resultados de la ciencia y la tecnología, la ampliación
de los flujos informativos, la inclusión de todo esto en la vida cotidiana
en forma de objetos e instrumentos, conocimientos y modo de vida transformados
están haciendo de hoy día un cambio y han elevado el valor social
de la novedad y la creatividad científica. El papel de la ciencia y la
tecnología se ha de ver en la vida social.(2)
Se entiende
la ciencia no solo como un sistema de conceptos, proposiciones, teorías,
hipótesis, etc., sino también, simultáneamente, como una
forma específica de la actividad social dirigida a la producción,
distribución y aplicación de los conocimientos acerca de las leyes
objetivas de la naturaleza y de la sociedad. Aún más, la ciencia
se presenta como una institución social, como un sistema de organizaciones
científicas, cuya estructura y desarrollo se encuentran estrechamente
vinculados con la economía, la política, los fenómenos
culturales, con las necesidades y las posibilidades de la sociedad dada.(9)
La ciencia
es una actividad social vinculada a las restantes formas de la actividad humana.
Es una actividad institucionalizada, permeable a los valores sociales y no puede
ser neutral; como institución social se encuentra estrechamente vinculada
a la economía, la política y los fenómenos culturales de
una sociedad determinada; a diferencia de la tecnología que constituye
una práctica social que involucra no solo equipos, sino conocimientos,
destrezas y problemáticas organizativas, valores e ideologías.
Entre estos tres aspectos existen tensiones e interrelaciones que producen cambios
y ajustes recíprocos.(10)
La tecnología
es un fenómeno social que surge y se despliega de un complejo sistema
cultural, donde hay que tener en consideración los conocimientos, hábitos
y valoraciones que cada sociedad impone por medio de rasgos singulares y universales.
Los estudios
CTS suelen definir un ámbito de trabajo académico, cuyo objeto
de estudio son los aspectos sociales de la ciencia y la tecnología, tanto
en los factores sociales que influyen sobre el cambio científico tecnológico
como en lo que atañe a las consecuencias sociales y ambientales.
El aspecto
más innovador de este nuevo enfoque se encuentra en la caracterización
social de los factores responsables del cambio científico y tecnológico
que propone en general para entender la ciencia y la tecnología, no como
procesos o actividades autónomas, sino como procesos o productos inherentemente
sociales donde los elementos no epistémicos o técnicos (por ejemplo
valores morales, convicciones religiosas, profesionales, presiones económicas,
etc.) desempeñan un papel decisivo en la génesis y consolidación
de las ideas científicas y los artefactos tecnológicos.(11)
La actual
etapa de la política de ciencia y tecnología en Cuba se caracteriza
por la creación de un Sistema Nacional de Ciencia e Innovación
Tecnológica, con rasgos semejantes a los sistemas nacionales de innovación
que se han instalado en otros países. Esta nueva etapa refleja los cambios
económicos y sociales que vive el país. Esos cambios apuntan a
la búsqueda de soluciones a la crisis económica y al desarrollo
económico y social. La innovación tecnológica se convierte
en un eslabón decisivo para actuar en el mercado internacional y también
para la eficiencia y la competitividad interna.
La Revolución
Científico-Técnica (RCT) ha representado una posibilidad extraordinaria
de progreso para el proceso salud-enfermedad en el hombre, tanto por su influencia
sobre el desarrollo social en general como sobre el desarrollo de las ciencias
médicas. Eso se concreta en la mayoría de indicadores como el
aumento de la expectativa de vida, la sensible disminución de la morbilidad
de enfermedades y las enormes posibilidades que tienen a mano estas ciencias
que no las tenían en el siglo pasado.(11)
Considerar
la salud como derecho fundamental del hombre y un deber de la comunidad, reconocer
la responsabilidad del Estado en la atención y cuidado de la salud, la
desaparición de las desigualdades en la distribución de los recursos
para la salud a escala nacional e internacional, luchar frontalmente contra
la pobreza, el hambre, la ignorancia y la insalubridad, todo ello será
lo que pueda garantizar el mejoramiento de la salud humana en el mundo subdesarrollado.(12)
La historia
se ha encargado de demostrar que los mayores problemas en la previsión
del futuro, no radica precisamente en los aspectos tecnológicos. Cuba,
privada de la posibilidad de importar lo más novedoso que existe en el
mundo de la ciencia y la tecnología, se ha visto obligada a modernizar
la infraestructura y a seguir sus propias líneas de trabajo basando sus
esfuerzos en el principal y único recurso esencial de la nación:
el potencial humano. Ha sido un esfuerzo constante y hay muchos resultados positivos
que permiten avizorar el futuro con optimismo.(13)
Fidel Castro
Díaz Balart,(14) en su libro Ciencia, Tecnología y Sociedad, señala
que Cuba ha desarrollado por sí misma la educación, la ciencia
y la tecnología que se usan como herramientas para erradicar la pobreza,
las desigualdades y globalizar el bienestar.
Específicamente
en el trabajo se hace referencia al principal objetivo de la reconstrucción
mamaria, que es permitir a la mujer recuperar su contorno corporal primitivo,
ayudando a superar el trance psicológico que supone la pérdida
de un órgano tan íntimo como es la mama, para la vida personal,
social y profesional.
Los músculos
de la región del tronco son los más utilizados en la reconstrucción
mamaria después de una mastectomía. En esta región se tienen
los músculos del dorso, del tórax y del abdomen. En relación
al uso de los músculos en el tratamiento reconstructivo en el cáncer
de mama, se puede referir cómo el colgajo TRAM clásico o pediculado,
descrito por Hartrampft, Scheflan y Black, quienes en 1982 en Atlanta, transfirieron
por primera vez el mismo.
Este colgajo
consistió en una porción vertical del músculo recto abdominal
con una isla transversal de piel abdominal inferior irrigada por perforantes
músculo cutáneas procedentes de la arteria epigástrica
superior. El daño a nivel de la pared abdominal donante fue el principal
incentivo para desarrollar técnicas menos invasivas y con mejor irrigación.(15)
Posteriormente
se hizo evidente no solo su condición de ser una técnica menos
agresiva para la pared abdominal, sino que la perfusión de estos tejidos
fue tan superior, que ya nadie discute sus ventajas y su utilización
se hizo extensiva a pacientes fumadoras, obesas o en presencia de cicatrices
abdominales previas.
En cuanto
a los músculos del dorso, el que se utiliza es el dorsal ancho que se
sitúa superficialmente en la parte inferior del dorso, excepto su parte
superior que está cubierta por la parte inferior del trapecio, y se encuentra
inervado por el plexo braquial. Se inicia en los procesos espinosos de la cuarta
o sexta vértebras torácicas, en los procesos espinosos de las
vértebras lumbares, en el sacro, en la fascia toracolumbar y en las cuatro
últimas costillas y termina en la cresta del tubérculo menor del
húmero.(3-6)
El músculo
recto del abdomen pertenece al esqueleto axil específicamente en la región
del tronco en su porción abdominal. Este se extiende desde la parte anteroinferior
del tórax hasta el pubis y está inervado por nervios intercostales
y por los ramos superiores del plexo lumbar. Tiene su inserción de origen
en la cara anterior de los cartílagos costales del quinto al séptimo
y del proceso xifoideo del esternón y termina insertándose por
un tendón en el pubis.(3-6)
La pared
anterolateral del abdomen está irrigada por varios vasos en la superficie:
la porción superior de la pared está vascularizada por ramas de
la arteria musculo frénica, una rama terminal de la arteria mamaria interna
y la porción inferior, por la arteria epigástrica superficial
y la arteria circunfleja iliaca superficial situada en posición lateral,
ambas ramas de la arteria femoral. La vena cava inferior es la principal vena
de la circulación en el abdomen y drena esta región, además
de la pelvis, el periné y ambas extremidades inferiores.(16)
Otros tejidos
que se utilizan son los de la región glútea, pero en este caso
no se toma ningún músculo sino la piel, la grasa y los vasos sanguíneos
que se encuentran en ellos, que se extienden desde el coxal y el sacro hasta
el trocánter mayor del fémur o sus proximidades. El grácil
es un músculo que se encuentra en los miembros inferiores, en particular
en la región medial del muslo, es un músculo largo, que se extiende
desde el coxal hasta el fémur, y se encuentra inervado por ramos cortos
del plexo lumbosacro, presenta su inserción de inicio en el pubis y termina
en la tuberosidad de la tibia y en la fascia crural.(3-6)
Las técnicas
que emplean tejidos propios para crear una mama natural consisten en la movilización
o el trasplante de tejidos de otras zonas del cuerpo como el abdomen, la espalda
o las nalgas (técnicas denominadas autólogas o colgajos). En algunos
casos estos tejidos o colgajos siguen unidos a su sitio original, conservando
su vascularización, y son trasladados hacia la mama mediante un túnel
que corre por debajo de la piel. Según la técnica puede ser preciso
o no emplear, además, un implante. En otros casos los tejidos empleados
para crear la mama son separados completamente de su sitio original, generalmente
del abdomen, las nalgas o del muslo, y son trasplantados al pecho mediante la
conexión a los vasos sanguíneos de esta zona.
Este tipo
de procedimiento debe ser realizado por un cirujano plástico con experiencia
en microcirugía. Independientemente de si el tejido se pasa por un túnel
bajo la piel o si se trasplanta, estas técnicas son más complejas
que las que emplean expansión cutánea, dejan más cicatriz
y el periodo de recuperación es mayor que para los implantes. Sin embargo,
el resultado estético es muy superior, solo suele precisarse una intervención
y no existen los problemas relacionados con el uso de implantes (formación
de cápsula, infección del implante). En algunos casos, cuando
se moviliza tejido del abdomen, existe el beneficio añadido de la mejoría
del contorno abdominal. Esta técnica se realiza también bajo anestesia
general, con una estancia hospitalaria entre 4 y 7 días.(17)
El cáncer
de mama es una de las enfermedades que no hacen distinción entre la población
de países desarrollados y en desarrollo y es el tipo de cáncer
con mayor presencia en las mujeres a nivel mundial. Datos de la Organización
Mundial de la Salud (OMS) señalan que cada año se detectan 1.38
millones de casos nuevos y ocurren 458 mil muertes por esta enfermedad.
Según
datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) en el continente
americano, la tendencia es similar, es decir el cáncer de mama es el
más común entre las mujeres (29% respecto al total de casos de
cáncer) y es la segunda causa de muerte por tumores malignos para este
grupo de población, superada únicamente por el cáncer de
pulmón; para el año 2030, la OPS estima más de 596 mil
casos nuevos y más de 142 100 muertes en la región, principalmente
en la zona de América Latina y el Caribe.(18)
De 2007 a
2014 la incidencia de cáncer de mama (número de casos nuevos por
cada 100 mil personas de cada sexo), para los hombres de 20 años y más
se mantiene muy bajas y relativamente estable, fluctuando las cifras entre un
0.39 y un 0.64 de casos nuevos por años. Sin embargo, en las mujeres,
la tendencia es al alza y es el año 2014 el que presenta la incidencia
más alta, con 28.75 casos nuevos por cada 100 mil mujeres de 20 años
y más. Así, para ese año, por cada caso nuevo en los varones
se detectan 29 en las mujeres.(18)
La reconstrucción
de la mama tras un cáncer es uno de los procedimientos quirúrgicos
actuales dentro de la cirugía plástica más seguros y gratificantes
para la paciente. El desarrollo de nuevas técnicas posibilita al cirujano
plástico crear una mama muy similar en forma, textura y características
a la no operada. Además, en la mayoría de los casos es posible
hacer la reconstrucción a la vez que se extirpa la mama, evitándole
así a la paciente la experiencia de verse mastectomizada.
Es un procedimiento
quirúrgico con una demanda cada vez más alta debido a la incidencia
del cáncer de mama y porque afecta a un rango etario amplio. En la actualidad
se ofrecen múltiples técnicas reconstructivas, algunas utilizan
expansores y/o implantes y otros diferentes colgajos. Las indicaciones dependen
de las pacientes, del equipo quirúrgico, el estadio de la enfermedad
y del tratamiento a que será sometida. Con esto se obtienen resultados
altamente satisfactorios y estables en el tiempo, lo que permite que estas pacientes
recuperen su imagen y su autoestima, permitiendo que se incorporen socialmente
y mejoren su relación de pareja.(15)
Como principales
objetivos de la reconstrucción mamaria se encuentra el recrear una mama
de aspecto natural, incluyendo la areola y el pezón; eliminar la necesidad
de llevar prótesis externas de relleno, lo cual le posibilita llevar
prendas de vestir que no serían posibles sin reconstrucción (bañadores,
escotes, etc.); rellenar el hueco y la deformidad que puede quedar en el tórax
y restaurar la imagen corporal, a la vez que se mejora la calidad de vida de
la paciente.
La incidencia
del cáncer de mama es alta y afecta también a mujeres jóvenes,
esto ha determinado una creciente demanda de procedimientos reconstructivos
cada vez más exigentes, revirtiendo la tendencia histórica y universal
de que las pacientes mastectomizadas no se reconstruyen, con lo cual superan
el miedo a las complicaciones quirúrgicas que puedan retardar el tratamiento
adyuvante y al temor de enmascarar una recurrencia.
En los últimos
años se ha observado un aumento de mastectomías profilácticas
determinado principalmente por la fobia al cáncer bilateral, la difusión
de casos mediáticos que la aconsejan, las indicaciones médicas
por lesiones de alto riesgo o presencia de mutación génica. Derivado
de lo anterior, se ha hecho más frecuente la adopción de métodos
reconstructivos por parte del paciente aconsejados en su mayoría por
el equipo tratante. En la actualidad en EE.UU., a pesar del éxito y beneficios
de la reconstrucción, un 20% de las pacientes mastectomizadas es reconstruido
de forma inmediata y un 20% lo hace en forma diferida.(15)
Hoy en día,
el cáncer de mama sigue siendo el tipo de tumor más habitual entre
las mujeres de la sociedad cubana. Además de ser una terrible enfermedad,
su tratamiento conlleva con frecuencia la mastectomía o extirpación
de la mama, con la consecuente pérdida de un seno para la mujer que la
padece.
La reconstrucción
mamaria es un paso esencial hacia la normalidad. No solo restituye un órgano
perdido, sino que ayuda a recobrar la feminidad, la propia imagen, el equilibrio
psicológico y contribuye a atenuar la conmoción que supuso la
lucha contra el cáncer.(19)
En general,
las pacientes deben ser estimuladas a realizarse el procedimiento por el beneficio
psicológico, social y sexual, en tanto se considere en todo momento los
factores de riesgo relacionados como la edad, peso y comorbilidades de las pacientes.
El procedimiento
de colgajo, también conocido como reconstrucción con tejido autólogo
es una manera para reconstruir la forma del seno después de la cirugía
para extraer el cáncer.
Estos procedimientos
usan tejidos de otras partes del cuerpo, como el vientre, la espalda, los muslos
o los glúteos para reconstruir la forma del seno. Por lo general proveen
un aspecto más natural y se comportan más como el tejido mamario
natural en comparación con los implantes mamarios. Por ejemplo, se pueden
agrandar o encoger a medida que se pierde o gana peso. Además, contrario
a los implantes mamarios que a veces necesitan cambiarse (si se rompe el implante,
por ejemplo), esta no es una preocupación con los colgajos de tejido.(20)
Los procedimientos
de colgajo de tejido presentan también algunas desventajas potenciales
que se deben considerar, dentro de las cuales se encuentran que los colgajos
requieren más cirugía y de una recuperación más
prolongada que los procedimientos con implantes de senos, estas operaciones
dejan dos sitios quirúrgicos y cicatrices: una en el lugar de donde se
extrajo el tejido (sitio donante) y la otra en el área del seno reconstruido.
Las cicatrices comienzan a desaparecer con el transcurso del tiempo, aunque
nunca desaparecen por completo, también algunas mujeres pueden presentar
problemas en el sitio del injerto, tal como hernias abdominales y daño
o debilidad muscular, y debido a que se necesitan vasos sanguíneos sanos
para el suministro sanguíneo del tejido, los procedimientos de colgajo
puede que no sean la mejor opción para fumadoras, y para las mujeres
que presentan diabetes no controlada, enfermedad vascular o enfermedades del
tejido conectivo.(20)
Entre los
tipos más comunes de colgajo de tejido que se utilizan se encuentran:
el colgajo TRAM (del músculo recto abdominal transverso) que utiliza
tejido del abdomen); el colgajo DIEP (perforador epigástrico inferior
profundo) que utiliza tejido del abdomen); el colgajo de músculo dorsal
ancho que utiliza tejido de la parte superior de la espalda; el colgajo GAP
(perforante de arteria glútea (también conocido como colgajo glúteo
libre) que utiliza tejido de los glúteos y el colgajo TUG (grácil
superior transversal) que utiliza tejido del muslo interior.
El método
más común de reconstrucción autóloga es el colgajo
TRAM, colgajo músculo cutáneo de recto abdominal con isla transversa
de piel, ya sea pediculado o libre. Este colgajo emplea el tejido redundante
abdominal infraumbilical, removido habitualmente en las abdominoplastías
estéticas. El colgajo TRAM pediculado se levanta preservando la arteria
epigástrica superior cuyo trayecto por el interior del músculo
obliga a sacrificarlo, ya que debe seccionarse en su porción inferior
para movilizar en conjunto la isla cutánea y el recto abdominal, tunelizándolos
debajo de la piel abdominal y armando una nueva mama en el tórax. El
colgajo libre TRAM es levantado con la longitud del pedículo epigástrico
inferior profundo y con un pequeño trozo de músculo recto abdominal
donde están contenidos los vasos perforantes. Este colgajo es separado
completamente del abdomen y llevado al tórax donde es anastomosado a
los vasos tóraco-dorsales o mamarios internos. Con esta técnica
el defecto en la pared abdominal o zona donante es bastante menor.(20)
Los colgajos
perforantes epigástricos superficial o profundo transfieren prácticamente
la misma cantidad de tejido que el TRAM libre, pero no se reseca ninguna porción
del músculo recto, con lo que la pared abdominal permanece prácticamente
sin daño.(20)
En general
este colgajo tiene complicaciones acotadas, siendo el seroma y las pequeñas
pérdidas parciales del colgajo las más frecuentes, sin embargo,
en pacientes fumadoras u obesas esta técnica puede estar contraindicada
por el mayor número y gravedad de las complicaciones. Aunque el colgajo
TRAM pediculado permanece siendo el colgajo más utilizado para reconstrucción
mamaria autóloga post mastectomía en muchos centros, la búsqueda
de mejorar la perfusión tisular y disminuir la morbilidad de la zona
dadora, ha dado pie al diseño y variaciones técnicas del propio
colgajo TRAM. Es así como gracias a la incorporación de la microcirugía
se ha logrado obtener un colgajo con mejor irrigación y que deja mínima
morbilidad de la pared abdominal: el colgajo TRAM libre en un inicio y más
recientemente los colgajos perforantes han ido ganando terreno. Los colgajos
perforantes son colgajos microquirúrgicos cuyo fundamento consiste en
la vascularización de un territorio anatómico por medio de una
arteria perforante, que emerge del tronco vascular principal, atravesando una
región muscular determinada, pero con total independencia de ésta,
lo que evita su sacrificio: se incluyen en este rubro el DIEP (Deep Inferior
EpigastricPerforator), que se utilizan para reconstrucción mamaria.(21)
El colgajo
TRAM libre fue descrito en 1979 por Holmstrom. Fue el primero en utilizar el
tejido que normalmente se desecha en una abdominoplastía, como colgajo
libre para reconstruir una mama. El colgajo TRAM libre basa su irrigación
en la arteria epigástrica profunda inferior, que tiene vasos, una arteria
y dos venas, de 2-3 mm de diámetro y un pedículo de 12-15 cm.
Estudios de perfusión in vivo y los hallazgos clínicos demostraron
la superioridad de la irrigación que tiene este colgajo cuando está
perfundido por la arteria epigástrica inferior.(15)
Para levantar
el colgajo se puede utilizar el ancho completo del músculo o solo una
parte de éste. En el área comprendida entre 2 cm por sobre y 6
cm bajo el ombligo, existen entre 2 y 8 perforantes mayores o iguales a 0,5
mm de diámetro. Normalmente las perforantes más laterales tienden
a tener un curso más directo y perpendicular a través del músculo
y habitualmente están acompañados de ramos nerviosos sensoriales
segmentarios y ramas motoras intercostales. Los vasos receptores comúnmente
utilizados son los tóraco-dorsales y los vasos mamarios o torácicos
internos. La necrosis grasa y las pérdidas parciales de tejido por lo
general no supera el 12% en pacientes fumadoras y 3% en no fumadoras.(15)
Por otra
parte, y siendo una de las razones que motivaron el refinamiento del colgajo
TRAM clásico, existe evidencia de un daño menor a la función
y estructura de la pared abdominal, como queda demostrado en varias publicaciones
donde se comunican menores tasas de hernia, abombamiento y alteraciones del
surco submamario, y una estadía hospitalaria más corta.
DIEP es
la forma más habitual de nombrar la técnica más novedosa
de reconstrucción mamaria. Emplea únicamente la piel y grasa del
abdomen, sin destruir ningún músculo y sin utilizar ningún
material extraño para el cuerpo (implantes mamarios). El objetivo del
cirujano plástico es crear un nuevo pecho lo más parecido posible
a una mama natural. Este procedimiento no interfiere en el tratamiento, ni en
el control posterior del cáncer de mama. Prueba de ello es que cada día
son más los oncólogos que lo recomiendan. Este método de
reconstrucción es el más utilizado en los centros hospitalarios
de mayor prestigio del mundo. Puede aplicarse a la mayoría de pacientes
mastectomizadas, lo que significa un gran paso adelante en la lucha contra las
secuelas del tratamiento del cáncer de mama.
El DIEP consiste
en aprovechar el exceso de piel y grasa del abdomen de la mujer, que por sus
características físicas de color, grosor y textura es la idónea
para la reconstrucción mamaria. El tejido que se extrae del abdomen se
lleva hasta el tórax, donde se une a una arteria y a una vena mediante
microcirugía para que tenga vascularización propia. Esto permite
remodelar una nueva mama que por color, tacto y comportamiento será muy
parecida a la natural. En muchos casos, esta técnica aporta también
un beneficio estético para el abdomen, ya que se extrae el exceso de
grasa como si se tratase de una lipectomía abdominal estética.(21)
Gracias a
un método de disección microquirúrgica, el DIEP permite
conservar los nervios y el músculo recto abdominal en su totalidad. A
diferencia de otras técnicas como el TRAM, que provocaban debilidad de
la pared abdominal o la pérdida funcional del músculo y requerían
una malla sintética de refuerzo, el DIEP no deja secuelas: tras la intervención,
se conserva la totalidad del movimiento del abdomen y la paciente puede incorporarse
de la cama sin ayuda de los brazos o seguir practicando deportes como la natación
y el esquí sin dificultades.
Tras la intervención,
las mamas evolucionarán armónicamente, es decir, cuando la paciente
adelgace la nueva mama adelgazará; si engorda, aumentará de volumen;
cuando la paciente envejezca y las mamas caigan, lo harán de una forma
simétrica. Es, por tanto, un tipo de reconstrucción duradera que
se integra absolutamente en el contorno corporal.
Los resultados
obtenidos con este tipo de cirugía son del todo satisfactorios. El DIEP
permite una reconstrucción mamaria de gran calidad que durante tanto
tiempo se ha intentado alcanzar sin éxito con otras técnicas.
El resultado es natural y definitivo. La nueva mama tiene el mismo tacto, forma
y evolución que la natural, lo que contribuye a recuperar el equilibrio
físico y psíquico que desafortunadamente conlleva la mastectomía
como tratamiento del cáncer de mama.
Los colgajos
que se toman del muslo o de los glúteos son usados para mujeres de quienes
no se puede tomar tejido de su abdomen debido a cirugía abdominal mayor
o que no tienen suficiente tejido abdominal para reconstruir un seno. Estos
tipos de colgajos son colgajos libres. Con estos colgajos se usa con frecuencia
también un implante para proporcionar suficiente volumen al seno.
Algunos
de estos son el colgajo IGAP, donde el tejido procede de los glúteos
y solo contiene piel, vasos sanguíneos y grasa. El colgajo PAP donde
el tejido, sin músculo, que procede de la parte interna superior del
muslo. El colgajo SGAP procede de los glúteos como en un colgajo IGAP,
pero incluye un conjunto diferente de vasos sanguíneos y contiene solo
piel, vasos sanguíneos y grasa y el colgajo TUG, el tejido, con músculo
procede de la parte interna superior del muslo. En
algunos casos, se usan juntos un implante y tejido autógeno. Por ejemplo,
el tejido autógeno puede usarse para cubrir un implante cuando no quedó
suficiente piel y músculo después de la mastectomía para
permitir la expansión y usar un implante.
El colgajo
de músculo dorsal ancho a menudo se usa junto con un implante de seno.
Para este procedimiento, el cirujano pasa músculo, grasa, piel y vasos
sanguíneos de la parte superior de la espalda, debajo de la piel hacia
la parte frontal del pecho. Esto proporciona cobertura adicional sobre un implante
y hace que un seno tenga un aspecto más natural que uno con solamente
un implante. Este tipo de reconstrucción a veces se puede usar sin un
implante. En pocas ocasiones, algunas mujeres pueden padecer debilidad en la
espalda, el hombro o el brazo después de esta cirugía.(20)
El colgajo
GAP es un tipo de cirugía de reconstrucción que utiliza tejido
de los glúteos para crear la forma del seno. Este procedimiento podría
ser una opción para las mujeres que no pueden o que no quieren usar las
áreas del estómago debido a delgadez, incisiones previas, colgajo
abdominal fallido, u otras razones, pero no se ofrece en todos los centros quirúrgicos.
El método es muy parecido al colgajo libre TRAM descrito anteriormente,
excepto que no se toma ningún músculo. La piel, la grasa y los
vasos sanguíneos se extraen de los glúteos y luego se pasan al
pecho.(20)
Una opción
más reciente para aquellas mujeres que no pueden o no quieren usar los
colgajos TRAM o DIEP consiste en una cirugía que usa músculo y
tejido adiposo que se encuentra a lo largo del pliegue inferior de los glúteos
hasta el muslo interior. A esto se le llama colgajo grácil superior transversal
o colgajo TUG, y solo está disponible en algunos centros médicos.
La piel, el músculo y los vasos sanguíneos se extraen y se pasan
al pecho, y los diminutos vasos sanguíneos se conectan al nuevo suministro
sanguíneo.
Las mujeres
con muslos delgados no tienen mucho tejido en los muslos. Por lo tanto, las
mejores candidatas para este tipo de cirugía son mujeres cuya parte interna
de los muslos se puede palpar y quienes necesitan un tamaño de seno más
pequeño o mediano. Algunas veces la localización del sitio del
injerto presenta problemas con el proceso de curación, aunque estos problemas
suelen ser menores y fáciles de tratar.(20)
Después
de que sana el pecho de la cirugía de reconstrucción y la posición
del montecillo del seno en la pared del pecho ha tenido tiempo para estabilizarse,
el cirujano puede reconstruir el pezón y la aréola. Por lo general,
el pezón nuevo se crea al cortar y mover pequeños trozos de piel
del seno que se ha reconstruido hacia el sitio del pezón, donde se les
da la forma de un pezón nuevo. Pocos meses después de la reconstrucción
del pezón, el cirujano puede crear la aréola. Esto se hace de
ordinario con tinta para tatuajes. Sin embargo, en algunos casos, los injertos
de piel se pueden tomar de la ingle o del abdomen y pegarse al seno para crear
una aréola cuando se reconstruye el pezón.(22)
La mastectomía
que conserva el pezón y la aréola de la mujer, llamada mastectomía
con conservación de pezón, puede ser una opción para algunas
mujeres, dependiendo del tamaño y ubicación del cáncer
de seno y de la forma y tamaño de los senos.
Entre los
factores que afectan la programación de la reconstrucción del
seno se encuentran: el tiempo apropiado para la reconstrucción del seno
es si la mujer necesitará radioterapia, la cual puede causar algunas
veces problemas para que sane la herida o infecciones en los senos reconstruidos;
para evitar complicaciones, algunas mujeres pueden preferir retrasar la reconstrucción
hasta que se haya completado la radioterapia. Sin embargo, debido a los adelantos
en las técnicas de cirugía y de radiación, la reconstrucción
inmediata con un implante generalmente es aún una opción para
mujeres que necesitan radioterapia. La reconstrucción del seno con tejido
autógeno se reserva generalmente para después de la radioterapia,
con el fin de que el tejido del seno y de la pared torácica dañado
por la radiación pueda ser remplazado por tejido sano de otros sitios
del cuerpo. Otro factor es el tipo de cáncer de seno. Mujeres con cáncer
inflamatorio de seno requieren usualmente que se extirpe más piel. Esto
puede hacer que la reconstrucción inmediata sea más problemática,
por lo que se recomienda retrasar la reconstrucción hasta después
de completar la terapia adyuvante. Aun cuando una mujer sea candidata para la
reconstrucción inmediata, ella puede elegir que se retrase la reconstrucción.(23)
Por ejemplo,
algunas mujeres prefieren pensar en el tipo de reconstrucción que desean
tener solo hasta después de haberse recuperado de su mastectomía
y del tratamiento adyuvante que siguió. Las mujeres que retrasan la reconstrucción
(o eligen no hacerse el procedimiento) pueden usar prótesis externas
de seno, o formas de seno para dar la apariencia de senos.
Estudios
han indicado que la reconstrucción del seno no aumenta la posibilidad
de que regrese el cáncer de seno ni tampoco de que sea más difícil
revisar una recurrencia con mamografías. Las mujeres a las que se les
ha extirpado un seno con una mastectomía deben de todas formas seguir
haciéndose mamografías en el otro seno. Las mujeres que se han
hecho una mastectomía conservadora de piel, o que tienen un riesgo mayor
de recidiva de cáncer de seno, pueden hacerse mamografías del
seno reconstruido si se reconstruyó con tejido autógeno. Sin embargo,
por lo general no se hacen mamografías en los senos que fueron reconstruidos
con un implante después de una mastectomía.(24)
Cualquier
cirugía implica la posibilidad de padecer complicaciones, por mucho que
se haya planificado de forma excelente y haya sido realizada por un equipo experto.
La complicación más terrible es la necrosis o muerte del tejido
trasplantado en la nueva mama, que solo puede aparecer los tres días
tras la cirugía reconstructiva. No obstante, este riesgo es solo del
1% y puede suceder debido a una trombosis de la arteria o la vena que aportan
la sangre al tejido: un pequeño coágulo de sangre ocluye la arteria
o la vena e impide que la sangre fluya y que la piel y la grasa trasplantadas
se oxigenen.
La reconstrucción con músculos le confiere a la mujer grandes ventajas ya que le propicia una forma y caída de la mama natural, así como un menor índice de necrosis, mejor irrigación y mayor disponibilidad de tejidos.
Conclusiones
El conocimiento
de los músculos es muy importante para su aplicación como técnica
reconstructiva en pacientes mastectomizadas por cáncer de mama. El cáncer
de mama es una enfermedad con elevada incidencia y prevalencia en Cuba y el
mundo y presenta variedades de tratamiento que permiten mediante técnicas
quirúrgicas muy avanzadas mejorar la autoestima y aspectos psicológicos
en la mujer.
Los músculos más usados en el tratamiento reconstructivo son los rectos abdominales, los dorsales anchos, los gráciles y de la región glútea se usa el tejido adiposo que se encuentra a lo largo del pliegue inferior de los glúteos hasta el muslo en su cara interna.
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Conflicto de intereses
Las autoras declaran que no poseen conflicto de intereses respecto a este texto.
Prieto Cordovés. Especialista
de Primer Grado en Medicina General Integral y en Anatomía Humana. Profesor
Asistente.
Serrano González.
Especialista de Segundo Grado en Anatomía Humana. Profesor Auxiliar.
Máster en MNT.
Bacallao Cabrera.
Especialista de Segundo Grado en Anatomía Humana. Profesor Consultante.
Guillemí Álvarez. Estomatólogo General Básico. Especialista de Primer Grado en Anatomía Humana. Profesor Asistente. Máster en Urgencias Estomatológicas.