Artículo
Impacto
social de los resultados del Servicio de Reproducción Asistida de Baja
Complejidad de Camagüey
Social impact of the results of the Service of Assisted Reproduction of Low Complexity of Camagüey
Orisel del
Carmen Rodríguez Abalo1*
Lorena Morales
Tarajano2
Mailet Morales
Tarajano3
Gilberto Méndez Guerrero1
1
Hospital Universitario Ginecobstétrico Ana Betancourt de Mora. Servicio
de Reproducción Asistida. Camagüey. Cuba.
2
Universidad de Camagüey. Camagüey. Cuba.
3 Universidad de Ciencias Médicas de Camagüey. Camagüey. Cuba.
* Autor para la correspondencia: oricel.cmw@infomed.sld.cu
RESUMEN
Introducción:
El mundo enfrenta un acelerado envejecimiento poblacional y tasas de fecundidad
por debajo de los niveles de reemplazo, situación a la que no son ajenos
la población y el servicio de Salud cubanos.
Objetivo: Valorar las implicaciones sociales de los resultados del Servicio
Provincial de Reproducción Asistida de Baja Complejidad de Camagüey,
durante el bienio 2016-2017, dados en el incremento del número de embarazos
logrados por Estimulación Ovárica Controlada e Inseminación
Intrauterina.
Métodos: En la contribución se emplearon los métodos
investigativos pertinentes, así como procedimientos diagnósticos
y terapéuticos.
Resultados: En el período estudiado, se logró un número
significativo de embarazos por técnicas de baja complejidad, así
como un número superior de embarazo en mujeres mayores de 36 años
con respecto a años anteriores.
Discusión: El Estado cubano ha trazado estrategias de trabajo
para brindar atención diferenciada a las parejas que presenten alteraciones
de la reproducción, en favor de solucionar la problemática mediante
alternativas cuyos resultados se correlacionan con los obtenidos a nivel mundial.
Palabras clave: fecundidad, reproducción asistida de baja complejidad, estimulación ovárica controlada, embarazo.
ABSTRACT
Introduction:
The world faces an intensive population aging and valuations of fecundity below
the levels of substitution, situation which is not foreign to the Cuban population
and health service.
Objective: To value the social implications of the results of the Provincial
Service of Assisted Reproduction of Low Complexity of Camagüey, during
the two-year period 2016-2017, given for the increase of the number of pregnancies
achieved by Controlled Ovarian Stimulation and Intrauterine Insemination.
Methods: In the contribution the pertinent, investigative methods were
used as well as diagnostic and therapeutic procedures.
Results: In the studied period, a significant number of pregnancies was
achieved by skills of low complexity, as well as a top number of pregnancy in
women older than 36 years old with regard to previous years.
Discussion: The Cuban State has planned work strategies to offer attention
differentiated to the couples that present alterations of the reproduction,
in favor of solving the problems by means of alternatives which results are
correlated by the obtained ones on a global scale.
Keywords: fecundity, assisted reproduction of low complexity, controlled ovarian stimulation, pregnancy.
Recibido:
3/4/2018
Aprobado: 12/3/2019
Introducción
La Organización
Mundial de la Salud (OMS), define la salud sexual y reproductiva como una condición
de bienestar físico, mental y social en los aspectos relativos al sistema
reproductivo en todas las etapas de la vida. Implica que las personas puedan
tener una vida sexual satisfactoria y segura, que tengan la capacidad de tener
hijos, la libertad de decidir si quieren tenerlos, cuándo y con qué
frecuencia. En esta última condición está implícito
el derecho de hombres y mujeres de estar informados y tener acceso a métodos
de regulación de la fertilidad que sean seguros, eficaces, asequibles
y aceptables y, también, el derecho a acceder a servicios de salud adecuados
que permitan a la mujer llevar a término su embarazo y tener un parto
de forma segura. El derecho a la reproducción se deriva del derecho a
la salud, sin embargo, no pueden concebirse como derechos reproductivos ni el
genérico derecho a un hijo ni aquellas facultades o poderes de actuación
que supongan un atentado contra los derechos fundamentales o libertades del
ser humano, tales como: el derecho a la vida, el derecho a la salud, el derecho
a la integridad física, psicológica y existencial que condicionan
el libre desarrollo de la personalidad o el derecho a una familia.(1)
En 2009 la
OMS, junto con un conglomerado de organizaciones internacionales, reconoce la
Infertilidad como "una enfermedad del Sistema Reproductivo definida por
la incapacidad de lograr un embarazo clínico después de 12 meses
o más de relaciones sexuales no protegidas". (1)
Diferentes autores en la literatura científica e investigaciones desarrolladas, consideran que la infertilidad es un problema global. Se estima que afecta entre 60 y 80 millones de mujeres y hombres en todo el mundo, pero su mayor incidencia se encuentra en los países en vías de desarrollo. Convertirse en padre y crear una familia es el objetivo de la mayoría de las parejas, sin embargo, no todas podrán lograrlo sin alguna intervención médica, por todo esto la OMS ha declarado la infertilidad como un problema de Salud Pública.(2,3,4)
Cerca de
un 20% de las parejas cubanas en edad reproductiva vivencian dificultades con
su fertilidad. Significa que alrededor de 200 mil parejas cubanas son hoy infértiles.
En comparación con el resto del mundo, según la OMS, entre un
15 y 20% de las parejas en edad reproductiva sufren de este problema (70 millones
de parejas infértiles), la cifra cubana no resalta demasiado, pero pudiera
adquirir connotaciones diferentes si se tiene en cuenta que en esta Mayor de
las Antillas, desde hace 37 años el nivel de reemplazo poblacional es
inferior a una hija por mujer y la edad de sus habitantes la convierte en uno
de los países más envejecidos del continente americano.
Por tal razón
como parte de la política del estado cubano, lo cual forma parte de los
lineamientos del Partido Comunista de Cuba (PCC), fue aprobado en el año
2007 el Programa Nacional de Atención a la Pareja Infértil, el
cual norma y protocoliza todos los procesos y actividades que se vinculan con
la atención médica a la infertilidad en el Sistema de Salud Pública
Cubana. Este programa comienza desde la Atención Primaria de Salud en
cada municipio del país, con consultas de Infertilidad insertadas dentro
del servicio de planificación familiar, donde acudirán parejas
procedentes de los consultorios médicos. Cada provincia cuenta con un
Servicio de Reproducción Humana insertado en cada Hospital Ginecobstétrico
o General, en el mismo se dará continuidad a las parejas remitidas del
nivel primario de salud.
El estudio
de la pareja infértil será siempre individualizado, según
las características particulares de cada pareja y a la posible etiología
causante de la infertilidad para evitar de esta forma demoras innecesarias en
su manejo. A su vez los casos que no tengan solución a este nivel serán
remitidas al tercer nivel que cuenta con tres Centros de Alta Tecnología,
en Occidente, Centro y Oriente del país. Estos centros tienen funciones
y responsabilidades adicionales que consisten en reclasificación de casos,
control estadístico, atención a quejas.
Según
estudios realizados en Cuba, la prevalencia de infertilidad oscila entre un
12 y 14%. Son varias las causas de infertilidad y dependen de cada población.
Pero, de manera general, se plantea que el 40% de las causas son de origen femenino,
el 40% de origen masculino y en un 10% la pareja comparte la causa. Aproximadamente,
existe un 10% de causas no explicadas.(5) Las enfermedades identificadas con
mayor frecuencia en la mujer son trastornos de ovulación en 40%, con
particular importancia en este rubro de la edad, la cual tiende a seguir aumentando
por la postergación de la fecha del primer embarazo; la patología
pélvica y de las trompas en 40%, inexplicable en 10% y problemas poco
frecuentes como anomalías anatómicas o enfermedades tiroideas
en 10%. Por lo anterior es más frecuente que las mujeres soliciten ayuda
de los profesionales de esterilidad, los cuales en la actualidad cuentan con
más conocimientos y diversos medios para ofrecer soluciones a la diversa
problemática de las parejas estériles.(6)
Las biociencias y sus avances tecnológicos deben servir al bienestar de la humanidad, al desarrollo sostenible de todos los países, a la paz mundial y a la protección y conservación de la naturaleza y del ser humano dentro de la sociedad, es por esto que los avances de las mismas ayudan a garantizar la salud y dar solución a muchos problemas médicos que como la infertilidad afectan a un gran porciento de la población mundial y cubana en particular.
Así
es el caso de los avances que existen hoy en día en la Salud Reproductiva
y en especial en la introducción de Técnicas de Reproducción
Asistida.
Teniendo
en cuenta que el mundo se enfrenta a un acelerado envejecimiento poblacional
y que las tasas de fecundidad están por debajo de los niveles de reemplazo,
el país ha trazado estrategias de trabajo para brindar atención
diferenciada a las parejas que presenten alteraciones de la reproducción
y así contribuir a minimizar esta seria problemática. Actualmente
según el anuario estadístico, el 19% de la población camagüeyana
está envejecida.
Por lo antes expuesto el presente texto tiene como objetivo valorar el impacto social de los resultados del Servicio Provincial de Baja Complejidad de Camagüey con un enfoque de Ciencia, Tecnología y Sociedad (CTS), durante el bienio 2016-2017.
Métodos
Se realizó
un estudio observacional descriptivo transversal en el Servicio Provincial de
Reproducción Asistida de Baja Complejidad del Hospital Universitario
Docente Ginecobstétrico Ana Betancourt de Mora, de Camagüey, con
el fin de exponer los resultados del bienio 2016- 2017. El
universo estuvo constituido por 707 parejas registradas en Base de Datos, que
cumplieron los criterios de inclusión, dados por la edad entre 20 y 42
años; así como criterios de exclusión, dados por pacientes
con historia clínica no localizada.
Para la
obtención de la información se aplicó una encuesta que
posibilitó la recogida de la información proveniente de las historias
clínicas, que constituyó el registro primario de la investigación.
En el procesamiento
y análisis se construyó una base de datos con el empleo del paquete
estadístico SPSS versión 21.0 para Windows; se emplearon números
absolutos y porcentaje para resumir los datos de las diferentes variables. Los
resultados se presentan en textos y tablas cuyo análisis permitió
dar salida a los objetivos propuestos en la investigación.
Se solicitó la aprobación de la investigación al comité de ética del Hospital Universitario Docente Ginecobstétrico Ana Betancourt de Mora, de Camagüey. Se explicaron los objetivos de la misma y beneficios esperados tanto para la población femenina afectada como para la toma de decisión en la atención sanitaria a estas. Además, se solicitó y recibió aprobación al director de la institución para trabajar con las historias clínicas. Se garantizó la confidencialidad de la información que se obtuvo y solo fue utilizada con fines investigativos.
Resultados
El análisis
de los resultados del Servicio Provincial de Reproducción Asistida en
el año 2017 muestra una estabilidad en el trabajo, avalado por cifras
que, si no superan las del año anterior, se comportan de forma similar.
El servicio ofertó 839 consultas y fueron atendidos 8450 pacientes, cifras
tres veces mayor que las reportadas en igual fecha del 2016 (2600) y que incluyen
la totalidad de las consultas realizadas por el equipo de trabajo. En este período
se recepcionaron 127 parejas nuevas, respecto a 130 el año anterior,
13 de ellas incluyen mujeres mayores de 36 años.
Se trabajó
aplicando la totalidad del equipamiento tecnológico recibido en diciembre
del año 2015, lo cual contribuyó a mejorar considerablemente los
resultados.
En este
período hubo un incremento de los procedimientos comparado con el 2016
en cuanto a: ultrasonidos, histerosalpingografías, cirugías endoscópicas
y abdominales, espermiogramas. Fueron remitidas similar número de parejas
con criterio de Técnicas de Reproducción Asistida de Alta Tecnología
(TRAAT) con 43 y 39 respectivamente y se le dio salida del programa a 7.
La actividad
de laboratorio también se incrementó con 2064 procedimientos,
respecto 1403 en el 2016, se realizaron 1598 espermograma y 96 estudios del
moco cervical. Se efectuaron 278 inseminaciones y se les aplicó este
procedimiento a 120 mujeres. Se
diagnosticaron 100 embarazos en el pasado 2017, respecto a 92 en el 2016. Los
resultados fueron buenos y reflejan estabilidad en el trabajo, 18 de ellos en
mujeres mayores de 36 años, tres veces más que el año anterior,
lo cual no significa que todo marche a la perfección, pero se trabaja
en aras de mejorar la calidad de los servicios.
La incidencia de embarazos ectópicos y aborto, se comportó de forma similar al 2016 con 9 y 6, respectivamente. Se mantiene elevado el número de gestaciones logradas en el curso del estudio luego del tratamiento de la sepsis vaginal con 30 pacientes respecto a 31. Hubo incremento del número de embarazos por Técnicas de Reproducción Asistida de Baja Complejidad (TRABC); se lograron 45 gestaciones tras el uso de la Estimulación Ovárica Controlada (EOC), respecto a 25 en el 2016, y se duplicó el número de gestaciones mediante el procedimiento de Inseminación Intrauterina (IIU) con 11 embarazos logrados (11%), hecho que se comporta similar en todo el país.
Discusión
La historia
de la infertilidad va de la mano con la historia de la humanidad misma. Muy
tempranamente aparece en el libro de Génesis, el primero de la Biblia,
el relato del primer caso registrado. Se trata de Abraham y Sara, una pareja
que llegó a la ancianidad sin haber conseguido la procreación.
En la antigua Mesopotamia al varón le era permitido adquirir una segunda
mujer cuando la primera era estéril. En la Grecia clásica, al
decir de Pausanias, la esterilidad era producto de la cólera de los dioses.(7)
Entre los
siglos XVII-XVIII se publicaron numerosos trabajos acerca de la infertilidad
como De Sterilitate Utriusque Sexus, escrito en 1609 por Jean Hucher (1570-1630),
y Observations diverses sur la stérilité, escrito por Louise Bourgeois
(1564-1644) en el mismo año. En 1672, a la edad de 31 años, el
médico holandés Regnier de Graaf (1641-1673) publicó su
gran trabajo sobre los órganos reproductivos femeninos De Mulierum Organis
Generationi Inservientibus Tractatus Novus (Nuevo tratado sobre los órganos
reproductivos femeninos), que estableció el ovario como la fuente del
óvulo.
En el año
1884, en Filadelfia, se produjo el primer caso confirmado de inseminación
artificial con donante, llevada a cabo por William Pancoast en el Jefferson
Medical College. El primer niño nacido por fertilización in vitro
ocurrió en 1978 en Reino Unido y se llamó Louise Brown (Steptoe
y Edwards). Casi 40 años de este suceso han transcurrido y muchas otras
novedosas técnicas de reproducción asistida han visto la luz como
esperanza para las parejas con problemas de la fertilidad.(8,9,10)
El actual
desarrollo de la sociedad le ha impuesto a la ciencia y a la tecnología,
en la esfera de la salud reproductiva, la búsqueda de nuevas técnicas
y estrategias de trabajo para enfrentar el panorama demográfico a nivel
global y en el ámbito cubano actual.
La ciencia
y la tecnología son multifacéticos y complejos fenómenos
sociales que como forma peculiar de actividad humana institucionalizada y fuerza
cultural transformadora tienen como fin la producción, difusión
y aplicación de conocimientos.(11)
Respecto
a la ciencia, se asume en el presente trabajo como: "el proceso de asimilación,
producción, difusión y asentamiento de ideas y valores en que
se funda la sociedad; es el conjunto de representaciones colectivas; creencias,
usos del lenguaje, difusión de tradiciones y estilos de pensamiento que
articulan en la conciencia social, es el ámbito en que se producen y
reproducen nuestras formas de vida, nuestra ideología, vista así
la cultura es un mecanismo de regulación social".(12)
Esta definición
permite entender la necesidad y la pertinencia en la solución de la problemática
en la que está convocada la comunidad científica de salud, como
consecuencia de la práctica histórica social. En la actualidad
en el ámbito académico se presenta con gran fuerza la polémica
sobre los conceptos de técnica y tecnología en su relación
con la ciencia. Un estudio muy didáctico y sintético lo desarrolla
Núñez Jover,(12) quien apoyado en la historia, define las diferencias
y nexos fundamentales entre estos conceptos.
La idea de
técnica está asociada habitualmente al hacer, al conjunto de procedimientos
operativos útiles desde el punto de vista práctico para determinados
fines. En una forma muy primaria y elemental, se asocia ciencia al conocer y
técnica al hacer.(12)
La función
de la técnica se vincula a la realización de procedimientos y
productos, al hacer cuyo ideal es la utilidad. La técnica se refiere
a procedimientos operativos útiles desde el punto de vista práctico
para determinados fines constituye un saber cómo, sin exigir necesariamente
un saber por qué. Ese por qué, es decir, la capacidad de ofrecer
explicaciones, es propia de la ciencia; (12) mientras que, la tecnología
considera el conjunto de conocimientos científicos y empíricos,
habilidades, experiencias y organización requeridos para producir, distribuir,
comercializar y utilizar bienes y servicios. Incluye, tanto conocimientos teóricos
como prácticos, medios físicos, "know how", métodos
y procedimientos productivos, gerenciales y organizativos, entre otros; identificación
y asimilación de éxitos y fracasos anteriores, capacidad y destrezas
de los recursos humanos. Desde otro punto de vista, se puede entender como la
actividad de búsqueda de aplicaciones a conocimientos ya existentes.(13)
La contribución de la ciencia y la tecnología es de vital importancia para la formación de especialistas dedicados a la medicina reproductiva, ya que permite lograr el eje integrador, capaz de aportar soluciones concretas a los problemas de salud del grupo social donde se desempeña, y lograr así, el impacto social para el cual se diseñó. También permite brindar ayuda solidaria a otros pueblos.
Implicaciones
sociales de la reproducción asistida en el contexto cubano y en la provincia
de Camagüey
En abril
del 2007 se aprobó el Programa Nacional de Atención a la Pareja
Infértil, con el objetivo de garantizar asistencia mediante la recepción,
diagnóstico y tratamiento de la infertilidad a partir de técnicas
de Baja y Alta complejidad, de manera que todo el que la necesite tenga acceso
al servicio. (14)
Este programa
se subordina al Programa de Atención Materno Infantil (PAMI), y tiene
el propósito de modificar el panorama demográfico cubano que se
caracteriza por baja natalidad, por ello existe una alta demanda de estos servicios.
La provincia
de Camagüey ofrece consulta de Infertilidad desde hace muchos años,
pero el Servicio Provincial de Atención a la pareja Infértil comenzó
a funcionar a partir de marzo del 2014, oferta consultas de Ginecología
de la Reproducción, Endocrinología, Urología, Psicología
y trabajo Social, Nutrición, Genética y Cirugía Mínimamente
Invasiva. Subordinado al Centro Territorial de Cienfuegos oferta aproximadamente
600 consultas al año, para un promedio de 3000 parejas atendidas, brindando
una asistencia en equipo y fiscalizando el trabajo en la Atención Primaria
de Salud (APS), donde debe iniciar el mismo y de donde deben proceder la mayoría
de las parejas previamente evaluadas o por otras vías del sistema de
salud. En este servicio se ofertan Técnicas de Reproducción Asistida
de Baja Complejidad (TRABC) cuyo desarrollo y aplicación ha potenciado
el crecimiento de una disciplina, la medicina reproductiva, que representa hoy
un ámbito complejo y dinámico relacionado con otras ciencias biomédicas
básicas y aplicadas.
Resulta interesante
el tema elegido porque no existe ninguna investigación en la provincia
que aporte datos sobre el manejo de la pareja infértil y sus resultados,
a la luz de una nueva etapa de avances tecnológicos, que permitirá
colocar la institución hospitalaria en un lugar de referencia y realizar
un enfoque integrado de la pareja para enfrentar esta problemática con
menor afectación de su esfera psicoemocional y su vez lograr mejores
resultados.
Al debatir
sobre la relación ciencia - tecnología - sociedad, esta última
ha de ser colocada como lo primero y rector respecto a estos múltiples
temas en juego. Dentro de la sociedad la educación para la salud desempeña
un rol muy importante. El desarrollo de las ciencias de la educación
permite asumir una concepción amplia de la misma, en la que educar implica
necesariamente romper los muros de las instituciones escolares y extender las
influencias educativas a otros contextos y niveles de participación.
De modo que desde las consultas de la actividad asistencial se le brinda tratamiento
a temáticas que se relacionan con la esfera reproductiva de pareja y
el accionar de la familia y los factores de la comunidad.
Este análisis
conduce obligatoriamente a la ampliación de las esferas de acción
del personal de la salud, sin que por ello tenga que asumir las funciones y
tareas de otros agentes educativos, como pueden ser la familia, el trabajador
social, las instituciones estatales, etcétera; cuestión que obviamente
sería no solo irrealizable sino también contraproducente.
La familia
como institución es lo que garantiza el reconocimiento de la personalidad
del sujeto, la eliminación de la realidad familiar en el ámbito
de la reproducción asistida sería el paso decisivo para la estabilidad
psicológica, es decir hacia el final del reconocimiento de la persona
como ser humano.
En el momento
actual en Cuba, existe una realidad para la solución de este problema,
que no basta con la obtención de recursos y tecnologías apropiadas,
sino que incluye el desarrollo de un Programa que establece las funciones en
cada nivel de Atención y las normas y algoritmos necesarios para lograrlo.
Con este nuevo programa de Atención a la Pareja Infértil se pueden cumplir principios y normas éticas subordinando el interés personal y beneficio propio a los intereses sociales, aplicando el principio de la justicia, dar atención equitativa a todas las parejas infértiles, sin despreciar determinados grupos de familias por su condición social o por otra causa. Se puede afirmar que, con la introducción tanto de la Inseminación Artificial Conyugal como la
Estimulación Ovárica Controlada, la provincia de Camagüey ha dado un paso importante en cuanto a técnicas novedosas.Se asumen los criterios de los autores Martel, Pagés y Madrid al considerar la Reproducción Asistida o Fecundación Artificial como un conjunto de técnicas o métodos biomédicos que sustituyen o complementan el contacto sexual de la pareja con la finalidad de lograr un embarazo. Refiriéndose así a la Inseminación Artificial como el depósito de forma no natural de espermatozoides, previamente capacitados, en el Tracto Reproductivo de la mujer con el fin de conseguir gestación.(15)
En el período
estudiado, se logró un número significativo de embarazos por técnicas
de baja complejidad (EOC e IIU), así como un número superior de
embarazo en mujeres mayores de 36 años con respecto a años anteriores.
Con este nuevo programa de Atención a la Pareja Infértil se cumplen
principios y normas éticas subordinando el interés personal y
beneficio propio a los intereses sociales, aplicando el principio de la justicia,
dar atención equitativa a todas las parejas infértiles, sin despreciar
determinados grupos de familias por su condición social o por otra causa.
Como resultado del accionar del Servicio Provincial de Reproducción Asistida de Baja Complejidad, la salud pública Camagüeyana ha dado un paso de avance en cuanto a la introducción de técnicas novedosas, que contribuyen a solucionar el panorama demográfico de la provincia con el consiguiente impacto social, a la luz del desarrollo científico tecnológico actual, en la esfera de la salud reproductiva.
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Conflicto
de intereses
Los autores declaran que no presentan conflicto de intereses para este texto.
Rodríguez
Abalo. Máster en Atención Integrada a la Mujer, Doctora en
Medicina, especialista en Primer Grado en Ginecología y Obstetricia.
Morales
Tarajano. Máster en Ciencias de la Educación Superior, Licenciada
en Educación. Especialidad Física - Electrónica.
Morales
Tarajano. Doctora en Medicina. Especialista en Primer Grado en Medicina
General Integral.
Méndez
Guerrero. Doctor en Medicina. Especialista en Segundo Grado en Ginecología
y Obstetricia.